NUEVA YORK, NY – Amber Heard, la actriz de Hollywood conocida por sus batallas legales de alto perfil y sus relaciones tumultuosas, vuelve a ser noticia, esta vez con acusaciones que involucran a su ex novio Elon Musk. Los expertos ahora están especulando sobre los motivos de Heard, acusándola de aprovechar su relación pasada para obtener ganancias personales y financieras.

Amber Heard y Elon Musk salieron de manera intermitente entre 2016 y 2018, luego del divorcio de Heard del actor Johnny Depp. En ese momento, su relación recibió una amplia cobertura de los medios, y ambas partes ocasionalmente hablaban positivamente sobre el otro. Sin embargo, nuevas afirmaciones sugieren que las intenciones de Heard durante la relación estaban lejos de ser genuinas.
Según fuentes cercanas a Musk, existe una creciente sospecha de que Heard podría haber albergado motivos ocultos. Supuestamente, la decisión de la actriz de tener una hija, Oonagh Paige Heard, a través de una madre sustituta en 2021 ha suscitado dudas sobre su independencia financiera y sus conexiones con Musk, de quien se rumorea que la apoyó económicamente durante su relación.
Aunque no hay pruebas públicas que vinculen a Musk con la hija de Heard, la especulación se ha visto alimentada por el silencio de Musk al respecto y los rumores que circulan en los círculos de Hollywood. Los críticos argumentan que la decisión de Heard de tener una hija podría servir como una forma de “seguro financiero” contra Musk, en caso de que su historia resurgiera alguna vez en disputas legales o financieras.
Los expertos legales señalan que, si bien tales afirmaciones son difíciles de probar, el momento de las decisiones de Heard y su estilo de vida de alto perfil han invitado al escrutinio público. “Cuando se trata de relaciones de alto riesgo que involucran a multimillonarios, cada decisión se vuelve objeto de especulación”, dijo un abogado.
Los críticos de Heard alegan que sus recientes comentarios públicos sobre Musk sugieren un esfuerzo calculado para mantener su conexión relevante en los medios. En entrevistas y conversaciones filtradas, al parecer ha hecho referencias veladas a su relación, alimentando las especulaciones sobre sus intenciones.
“Ella sabe cómo jugar la carta de la simpatía pública”, afirmó una fuente cercana a Musk. “Amber tiene un historial de enmarcarse como una víctima, y existe la preocupación de que pueda usar el nombre de Elon para su beneficio”.
Elon Musk se ha mantenido en gran medida en silencio sobre el asunto, adhiriéndose a su enfoque habitual de evitar el drama personal a la vista del público. Sin embargo, las personas cercanas a él dicen que está al tanto de los rumores y está tomando medidas para garantizar que su reputación y sus activos estén protegidos.
Un representante de Musk se negó a hacer comentarios, afirmando únicamente que “Elon está centrado en sus negocios y su familia”.
A medida que la historia gana fuerza, la respuesta pública ha estado dividida. Los partidarios de Heard argumentan que tiene derecho a vivir su vida sin juicios constantes ni insinuaciones sobre sus elecciones. Mientras tanto, los fanáticos de Musk creen que Heard está tratando de explotar su pasado para obtener ventajas financieras y sociales.
En las redes sociales, el debate ha sido feroz. “Amber Heard tiene todo el derecho de tomar sus propias decisiones, pero su historial hace que sea difícil ignorar el momento en que todo ocurre”, escribió un usuario de Twitter. Otro respondió: “La gente debe dejar de asumir lo peor sobre ella. Ya ha pasado por bastante”.
Con las batallas legales de Heard con Johnny Depp aún frescas en la memoria pública, y el enfoque implacable de Musk en sus emprendimientos como SpaceX y Tesla, este último capítulo agrega otra capa de complejidad a sus respectivas narrativas.
Queda por ver si las acusaciones contra Heard tienen algún mérito o son solo otro remolino de chismes de Hollywood. Por ahora, la especulación en torno a la hija de Heard y su relación con Musk sirve como otro recordatorio más de cómo las figuras públicas deben manejar las relaciones personales bajo el duro resplandor de los focos.
Una cosa es segura: cuando se trata de Amber Heard y Elon Musk, el drama está lejos de terminar.